Masiva marcha de estudiantes reaviva demandas por mejor educación en Chile
Varias decenas de miles estudiantes universitarios y de secundaria chilenos marcharon hoy por la principal avenida de Santiago, en demanda de una enseñanza pública gratuita y de calidad, que la presidenta Michelle Bachelet prometió en su programa de Gobierno, pero que aún no ha concretado.La movilización, la primera desde que Bachelet asumió su segundo mandato, el pasado 11 de marzo, persigue que los estudiantes participen en el diseño de las reformas que elabora el Ministerio de Educación y que conformarán varios proyectos de ley que serán enviados a trámite al Congreso en el segundo semestre del año.
"Nos jugamos por la participación en la reforma. Creo que es fundamental que demostremos que somos muchos y que tenemos propuestas", dijo Naschla Aburman, presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica (Feuc).
"Hay ciertas indefiniciones en el Gobierno y en el Ministerio de Educación que nos producen escepticismo", declaró en tanto Tomás Leighton, portavoz de la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios (Cones).
"Se prometió el envío de proyectos de copago, del fin del lucro y de la selección y estamos expectantes del envío", agregó.
Bachelet ha impulsado una reforma tributaria con la que busca aumentar en unos 8.200 millones de dólares anuales la recaudación fiscal, para financiar cambios de fondo a la enseñanza, garantizando gratuidad en todos sus niveles.
Tras haberse reunido un par de veces con el ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, los dirigentes estudiantiles han destacado la ambigüedad de sus propuestas en puntos que para ellos son fundamentales, como la gratuidad, el fin del lucro y a la administración municipal de la enseñanza básica y secundaria.
El Gobierno ha insistido en que está abierto a escuchar a todos los sectores involucrados en la reforma y que recogerá el máximo de propuestas que permitan avanzar gradualmente a un sistema gratuito y de calidad.
También acogió como "un derecho" la decisión de los estudiantes de manifestarse y permitió que la marcha se desplazara por la principal avenida de la capital, La Alameda, hasta el frontis del palacio de Gobierno, cosa que no ocurría desde 2011, cuando comenzaron las masivas protestas por la educación.
Durante prácticamente todo su trayecto la movilización de los estudiantes se produjo en forma pacífica, sin que fuera necesaria la intervención de la policía hasta después de concluida, cuando irrumpieron algunos grupos de encapuchados.
La marcha concluyó con un acto en el Parque Almagro, aledaño al centro cívico.
Los dirigentes estudiantiles cifraron en más de 100.000 los asistentes a la marcha, mientras que la policía estimó que eran unos 40.000.
Paralelamente a la movilización de Santiago, hubo marchas estudiantiles en ciudades del norte, centro y sur del país, como Iquique, Calama, Copiapó, Valparaíso, Temuco, Valdivia, Osorno y Punta Arenas